Autoridades estatales bloquearon el paso a grupos de choque y golpeadores del Sindicato del Cemento, quienes portaban armas y pretendían tomar por la fuerza el trabajo de traslado de materiales y adueñarse de minas en Zimapán.
El Sindicato del Cemento intentó nuevamente ingresar a Hidalgo, y la tensión escaló rápidamente.
Más de 100 de sus integrantes, provenientes del Estado de México, en autobuses y combis solamente llegaron hasta la comunidad de Remedios, en Tasquillo. Traían armas y capuchas, lo que llevó a las autoridades estatales y municipales a bloquear su avance.
Los vecinos de Zimapán han señalado en redes sociales, que este grupo es violento y pone en riesgo la seguridad de las familias de la región.
Además, lo relacionan con Aylén Trejo, quien conoce la importancia de la actividad minera y todo lo que se genera alrededor.
La comunidad rechaza la incursión de este sindicato, pues consideran que sus lideres buscan adueñarse de minas y cerrar accesos a fuentes de empleo para los hombres y mujeres nativos y vecinos de esta región.
De acuerdo con información oficial, este es el segundo intento del grupo por tomar control en la zona.
Y nuevamente la intervención policial bajo el mando de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo, fue clave para impedir que la situación se agravara, evitando que estos grupos de choque lograran su propósito.
